Ya que en el post anterior mostré mi copia del Corán, me pareció justo que debía hacer lo propio con mi Biblia.
Esta Biblia la he tenido durante muchísimos años, estoy seguro que me la regalaron cuando me estaba preparando para mi Primera Comunión (increíble pensar lo que un niño de esa edad piensa de tanta liturgia).
Como pueden ver, se trata de la Biblia Latinoamericana de Hirault y Riccardi. Siempre me gustó mucho esta edición, tiene ese toque "moderno del siglo XX" que la Iglesia Católica estaba desesperada por imprimir en todos lados.
Para empezar, la Biblia está comentada al pie, lo cual ya es una anomalía.
Y lo más extraño: tiene fotografías. En general son fotografías que supongo ilustran diversos valores cirstianos, pero me sigue pareciendo algo extraño.
En fin, esta Biblia sí que la he leído más que el Corán. De hecho, la he leído completa varias veces. Al igual que el Corán, no con fervor religioso, si no con curiosidad académica.
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